Había una vez un Santo muy preocupado porque nadie le rezaba. La gente rezaba a San José, a San Pedro, a San Isidro; pero a él nada.Así que pidió una reunión con Dios y éste le recomendó: "Hazte unas tarjetas de presentación y repártelas por todo el mundo. Di que haces milagros por encargo; pero eso sí, no se las des ni a los MARICONES, ni las MUJERES FÁCILES". Y así lo hizo, y ahora es el santo más milagroso de más devoción en todo el mundo.
Dime ¿cómo se llama ese santo?
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¡Piensa! ¡Acuérdate!
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¿No sabes quien es?
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Ahhh jaaaaaajaaaaaaaaaaaaaaajaaaaaaaaa . . .
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¡Jajajajajajajajajajajaaaaaaaaaajajajaja!
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¡Así que no te dieron la Tarjetita eh!
miércoles, 6 de febrero de 2008
Ojo al Santo
Publicado por
pablo
en
23:50
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Etiquetas:
Textos Humor
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